Ha sido muy sencillo dar forma a la vecina, porque realmente creo que toda la magia reside en los rulos y lo hermosas que son las sábanas.
Me ha dado pena cortar, pero de estar guardadas tantos años en el pueblo resulta que tenían unos lamparones que decían:"Tirame o meteme la tijera ya, muchacha". También algunos agujeros polilleros y un olor extraño (pero no desagradable) .
Ajá, la vecina ya está dibujada y casi recortada. Resulta que queda de esta manera:
La base pequeña, los costados inclinados y el arco superior que une esos tres puntos son un molde muy fácil para dar forma a un personaje. Os animo a probar. Antes los hacía rectangulares, pero me parece que con esa forma queda una proporción más bonita (cabezones).
La nariz asemeja el pétalo puntiagudo de una flor.
Ahora toca hilvanar y coser las piezas delanteras.
Me ha gustado mucho la idea de la amiga Camino. Un gato con rulos pá la vecina sería perfecto. ¡Gracias!
¡Hale, a por ello!
¡Uhhhh! De pronto me entró la desesperación por mirar el resultado de tu trabajo, pero es mejor así, paso a paso. Al final resulta más tremendo ver cómo con pequeños pasos se llegó a al resultado.
ResponderEliminarSé feliz :)
quereos conocer a la vecinaaaaa!!! ^______^
ResponderEliminarVamos que ya va tomando forma! Yo estoy haciendo un gato que quizás vaya con esta señora, no tiene rulos pero quizás se lleven bien igual (cuando este listo te lo mostraré) un saludo!
ResponderEliminarque ganas de conocer a la vecina!
ResponderEliminar:)
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